Alma Denisse Sánchez, hija de la candidata asesinada Alma Rosa Barragán, triunfó con casi 50 por ciento de los votos en la elección a presidenta municipal que buscaba su madre en Moroleón, Guanajuato.
Aunque la sustituyó el 31 de mayo, Sánchez obtuvo 48.5 por ciento de los votos con 97 por ciento de las actas computadas al representar a Movimiento Ciudadano (MC), por encima del 22 por ciento de su más cercana rival, Grecia Pantoja, del Partido Acción Nacional (PAN).
El asesinato de Barragán, el 25 de mayo, causó conmoción nacional por publicarse un video del ataque que ocurrió cuando ella estaba en un mitin en Moroleón, un municipio de cerca de 50 mil habitantes que colinda con el estado de Michoacán, donde el crimen organizado tiene presencia.
Su muerte se destacó en las elecciones más violentas de México, donde hubo al menos 935 agresiones contra políticos, incluyendo 97 asesinatos, de acuerdo con la consultora Etellekt, referente en el tema.
Sánchez reemplazó a su madre apenas una semana antes de la elección y acudió a votar este domingo con medidas de protección, y hasta ahora no se ha pronunciado sobre su victoria.
En particular, los crímenes contra candidatos de MC han sido de alto perfil, como el asesinato de Abel Murrieta, quien buscaba ser alcalde de Cajeme, en el norteño Sonora, donde fue procurador y abogado de víctimas de una masacre de mormones.
Además, la semana pasada un grupo armado secuestró a Marilú Martínez, candidata a la presidencia municipal de Cutzamala de Pinzón, en el estado de Guerrero, y a su familia.
Aún este domingo, el coordinador nacional de MC, Clemente Castañeda, denunció ante el Instituto Nacional Electoral (INE) la “sistemática guerra sucia” contra sus aspirantes.
“La guerra sucia arrecia porque hay particularmente en redes sociales una serie de campañas que lo que intentan es desprestigiar a nuestras candidatas y nuestros candidatos”, comentó al votar en Guadalajara.
México tuvo las elecciones más numerosas de su historia este 6 de junio, en el que más de 93 millones de mexicanos estaban llamados a renovar los 500 diputados del Congreso federal, 15 de 32 gubernaturas, 30 congresos locales y más de mil 900 ayuntamientos.
La votación ocurrió después de sus dos años más violentos, con 34 mil 681 asesinatos en 2019 y 34 mil 554 en 2020.
Con información de EFE