“El ritmo del incremento de casos y muertes (de COVID-19) en México es muy preocupante”, alertó este lunes el director general de la Organización Mundial de la Salud durante la rueda de prensa bisemanal donde se analiza la situación del coronavirus.
El doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus destacó que tanto el número de fallecidos como el de casos se dobló entre la semana del 12 de octubre y la del 20 de noviembre, pasando el primero de 2000 a 4000 y el segundo, de 31.000 a más de 60.000.
“Creo que esto muestra que México está en mal estado”, desatacó el máximo representante de la Organización, quien añadió que “cuando ambos indicadores, las muertes y los casos, aumentan, es un problema muy serio. Nos gustaría pedirle a México que sea muy serio”.
Con respecto a la observación de una periodista de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no utiliza la mascarilla en sus apariciones públicas, Tedros indicó que la Organización no entra en comportamientos individuales sobre si hay personas que llevan mascarilla o no, pero resaltó la importancia de llevarla, de mantener la distancia de seguridad y de que “los líderes den ejemplo”.
“Queremos que los líderes se conviertan en modelos (de comportamiento), queremos que las personas influentes también lo sean. Cuando decimos líderes pueden ser líderes políticos, pueden ser líderes religiosos, pueden ser líderes tradicionales y pueden ser otras personas influentes, y tienen que dar ejemplo de otra manera, quiero decir que duplicar las muertes y los casos en tres semanas es una mala señal”, destacó.
"La situación en #México es muy preocupante. Los números muestran que el país está en mala situación.
Cuando suben los casos y también las muertes es un problema muy serio y pediríamos a México que sea serio. Esperamos que todos los líderes den ejemplo". @DrTedros #COVID19 pic.twitter.com/DP8em7L6QE— Noticias ONU (@NoticiasONU) November 30, 2020
Una buena noticia y una advertencia
En el lado positivo, Tedros destacó que la semana pasada se registró la primera reducción de nuevos casos notificados a nivel mundial desde septiembre, especialmente debido a la disminución de casos en Europa tras la adopción de medidas “difíciles pero necesarias” en el viejo continente.
“Esta es una noticia bienvenida, pero se debe interpretar con extrema cautela. Las ganancias pueden perderse fácilmente, y aun así hubo un aumento de los casos en la mayoría de las demás regiones, y un incremento de muertes. No es momento para la autocomplacencia, especialmente con la temporada de vacaciones que se aproxima en muchas culturas y países”.