Redacción / México.- “Tenemos finanzas públicas sanas, no hay nada que temer, tenemos para lo fundamental, no va a haber despidos de trabajadores, no van a disminuir los sueldos en términos reales, no van a faltar los alimentos básicos, no va a haber inflación, se amplían los apoyos a los pobres, no se detienen las obras prioritarias -se cuenta ya con ese presupuesto-“, refrendó el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia matutina de este lunes.
Aseguró que la estrategia para la recuperación económica ante la crisis que originó la epidemia de COVID-19 ha funcionado.
“Nos ha ido mejor en cuanto a la estrategia que se aplicó porque nos estamos recuperando, ese es un hecho. Se cumplió nuestro pronóstico de que íbamos a caer y nos íbamos a levantar, que iba a ser una V. Tenemos indicadores que demuestran que estamos saliendo de la crisis económica y estamos saliendo con costos bajos”, afirmó.
Resaltó que el restablecimiento del peso frente al dólar y la recontratación de 90 mil empleos formales tras la pérdida de un millón, significan buenos indicios.
El primer mandatario fue enfático al reiterar que no se contratará deuda, a diferencia de otras épocas y países, para paliar el momento económico actual o rescatar a las grandes corporaciones.
“Que no se esté esperando que vamos a contratar deuda para reactivar la economía. No. No porque la deuda nos hunde. Podríamos de manera irresponsable contratar deuda y dejárselas a los que vienen, pero no son los gobiernos que vienen, son las nuevas generaciones, son nuestros hijos, son nuestros nietos. Un país endeudado, es un país atado”, subrayó.
La apuesta, dijo, seguirá siendo al fortalecimiento de la economía popular a través de la dispersión de recursos a quienes más los necesitan y el impulso a las pequeñas empresas para fomentar el consumo.
“Nosotros no nos endeudamos y con una política de austeridad, apretándonos el cinturón —el gobierno se apretó el cinturón—, logramos liberar fondos para apoyar abajo de manera directa. Esto se complementó con el apoyo de nuestros paisanos migrantes que han enviado remesas a sus familiares como nunca en la historia. A pesar de la pandemia y también del desplome de la economía en Estados Unidos, han crecido las remesas que envían nuestros paisanos a sus familiares y eso llega a 10 millones de familias”, explicó.
Destacó que hay suficiencia en personal, camas de hospitalización e insumos para atender a personas enfermas graves de COVID-19.
“Consideramos que a pesar de los pesares vamos bien en la atención de las dos crisis. En la pandemia, con todo el dolor que ha dejado, estamos atendiendo enfermos, salvando vidas; contamos con el apoyo de todo el personal médico. No han faltado ni faltarán camas, ventiladores para atender enfermos y vamos avanzando poco a poco, vamos saliendo de esta pesadilla, va pasando la pesadilla de la pandemia”, refirió.
- En este marco, agregó que en agosto se han creado 90 mil empleos en lo que va de agosto, “si salen bien los datos de estos días que nos faltan por registrar, ya tenemos 90 mil recuperados, espero que sean 100 mil, de un millón perdidos; entonces, ya se detuvo la perdida de empleos formales y espero que sigamos ganando; en medida que se va normalizando la actividad productiva, vamos a ir recuperando los empleos perdidos”.
“Fue, creo yo, acertado abrir desde el 1 de junio la actividad productiva en algunas ramas la la economía como la industria automotriz, de las autopartes, de la construcción y la minería”, indicó.
- A dos años de ocupar la silla presidencial, el titular del Ejecutivo aseguró que al finalizar este 2020 se habrá concluido con la primera etapa de lo que llama la Cuarta Transformación.
“Estamos, lo voy a decir mañana, a punto de terminar la primera etapa, que consiste en sentar las bases de la transformación. Creo que ya se definió con mucha claridad lo que es este gobierno, se están sentando las bases, los cimientos para la transformación.
“Yo me comprometí que para el 1º de diciembre de este año, al cumplir dos años, iban a estar ya sentadas las bases y voy a reafirmarlo mañana. Hice 100 compromisos cuando tomé posesión y he cumplido como 96, por eso me estoy dando el tiempo al 1º de diciembre, pero vamos bien, no nos hemos desviado a pesar de la pandemia y de la reacción conservadora, además, digo, de los ataques y obstáculos ahí vamos hacia adelante transformando y no tenemos intenciones de dar marcha atrás y vamos bien, vamos cumpliendo con nuestro propósito”, refirió.
- Respecto a conflictos entre partidos políticos por la presidencia de la Cámara de Diputados, el primer mandatario señaló “que hay que respetar la legalidad y no hacer lo mismo de antes, nada de maniobras por cargos, es decir, hacer cosas que a todas luces son indebidas, se tiene que respetar la ley, el reglamento”.
Sin embargo, aclaró que corresponde al Poder Legislativo llegar al mejor acuerdo posible, siempre acatando la ley.
“De acuerdo al reglamento, el primer año la presidencia del Congreso corresponde al partido que obtiene más votos o más escaños, que tiene más diputados, en el reglamento se establece.
“Segundo año para el que obtiene el segundo lugar y correspondía al PAN, pues se quería modificar el reglamento y como se tiene la mayoría se puede, pero no se debe, porque la política es un imperativo ético.
“Entonces, si está establecido de que para el tercer año es el que obtuvo el tercer sitio, así debe de ser y se debe de respetar”, dijo.
- El presidente López Obrador rechazó que llegue al segundo año de su administración con una baja en su aprobación, por lo que acusó a la encuesta del periódico Reforma de estar “cuchareada”.
“Me he mantenido. Hay una encuesta internacional en donde se mide a los jefes de Estado de los países, estoy en segundo sitio, segundo lugar mundial y he caído con la pandemia dos puntos, pero cada quien tiene su medición”.
- El primer mandatario negó que se esté pidiendo a los funcionarios públicos que promuevan la rifa del avión presidencial, por lo que nuevamente acusó al diario Reforma de dichos señalamientos.
“No, eso también lo dice el Reforma y no es cierto, que se les está obligando a los burócratas a comprar un cachito de la Lotería. No es cierto, no se obliga a nadie, todo es voluntario, el que quiera ayudar a vender y a comprar cachitos para la rifa”, aclaró.
Aprovechó para invitar a la población a comprar su boletos para la rifa del próximo 15 de septiembre.
“Le pido a la gente que nos ayude para que sigan comprando su cachito. Va muy bien, o sea, se va a cumplir con el propósito. La semana próxima va a venir, o en esta semana puede venir el director de la Lotería a informarles de cómo vamos sobre esto”.
Confió en que por lo menos se venderán cuatro de los seis millones de boletos.
“Lo voy a explicar porque es interesante. Son seis millones de cachitos, mínimo, mínimo, mínimo se van a vender cuatro millones, pero los dos millones que queden pasan también al Insabi, de modo que en la rifa el Insabi tiene, además de lo que va a recibir de los dos mil, tiene la posibilidad de ganar en un 33 por ciento los premios”.