The Wall Street Journal publicó el miércoles que al expresidente Enrique Peña Nieto lo investiga la Fiscalía General de la República por el caso Lozoya en la compra de Agronitrogenados y Odebrecht.
En paralelo, y si le damos el justo valor a la declaración de la defensa de Emilio Lozoya cuando dice que su cliente “no se mandaba solo”, el único funcionario por encima del exdirector del PEMEX era Peña Nieto.
El presidente López Obrador aseguró desconocer si hay en proceso una investigación en contra de su antecesor. Dijo que la Fiscalía es independiente pero que su gobierno no presentará una denuncia en contra del priista porque no busca anclarse en el pasado, pero sí mirar hacia adelante.
Asumamos que la Fiscalía sí investiga a Peña Nieto, como dice la nota de Juan Montes y José de Córdoba del WSJ, y que ha decidido ir por el mexiquense a pesar y en contra de lo que ha declarado el presidente de no ir por Peña Nieto.
Creamos que Alejandro Gertz, como fiscal de la Nación sí tiene elementos para llevar ante la justicia al de Atlacomulco.
Pensemos que, por primera vez en la historia reciente de México, hay un proceso legal, independiente y no político, en contra de un expresidente, cuyo objetivo es la lucha anticorrupción en contra de quien ocupó el cargo político más importante de este país.
Si lo anterior en realidad sucede en estos momentos, estaríamos dando el primer paso para acabar con la impunidad y, sin duda, ir eliminando la corrupción de la vida pública de México.
Lo contrario, que alguien de la FGR le haya filtrado al WSJ información falsa, nos llevaría a un estado de incredulidad en la lucha contra la corrupción.
Más aún, si la secretaria de la Función Pública anunció la semana pasada que detectó irregularidades por más de 544 mil millones de pesos en la administración de Peña Nieto, solo abonaría a la creencia, casi certeza, que los niveles de corrupción inundaron toda la administración federal en el periodo 2012-2018.
El fiscal Gertz puede convertirse en la figura emblemática de la lucha anticorrupción si, como lo público el WSJ, Peña es investigado. Y si es llevado ante los tribunales, nada más imagínese.
¿Usted ve que eso sea posible?
La Letrina
¿Proponer “democratizar” la elección de las autoridades de la UNAM fue una ocurrencia de un diputado morenista o de plano le están midiendo el agua a los camotes para hacer la Toma de Ciudad Universitaria?