México.- María Consuelo Mejía Piñeros, galardonada con la presea “Elvia Carrillo Puerto” 2019, pidió respetar plenamente los derechos humanos de las mujeres y las niñas, y acabar con la desigualdad de géneros, al señalar que la conciencia es libre y el Estado es laico.
Durante la sesión solemne en el Senado, donde recibió el galardón por su contribución a los derechos femeninos, dijo que la desigualdad que todavía se padece en América Latina, es inadmisible, y reconoció que a pesar de haber nacido en Colombia, es mexicana, como su propio feminismo.
En su calidad de directora de “Católicas por el Derecho a Decidir”, organización que incidió de manera importante en el debate para despenalizar el aborto en la Ciudad de México, dijo que es fundamental proteger la laicidad del Estado como fundamento de la democracia.
Desde la tribuna del Senado, la galardonada dijo que la brecha entre géneros ha sido impulsada por la jerarquía y, en el caso de América Latina, las más afectadas han sido las mujeres más vulnerables.
Destacó que el estereotipo de inferioridad, los abortos clandestinos y la violencia, afectan más a las mujeres indígenas, afrodescendientes, adolescentes y niñas a quienes se les ha ocultado más la información.
De ahí que al definirse a sí misma como “católica roja”, por el sentido de libertad y justicia que significa ese color, Mejía Piñeros reiteró que ha hecho de la lucha contra la injusticia social su causa de vida.
Las muertes por abortos inseguros son sólo la punta del iceberg de la desigualdad que prevalece en muchos países y en algunos sectores de la sociedad, explicó.
Semblanza
A nombre del Senado, la senadora Martha Lucía Mícher Camarena, presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, presentó una semblanza de la galardonada, a quien comparó con la propia Elvia Carrillo Puerto.
Explicó que la feminista mexicana de principios del siglo XX, fue llamada “La Monja Roja” por su lucha a favor de las libertades políticas y sexuales de las mujeres, a pesar de haber sido educada en una escuela católica y de ser creyente.
De manera paralela, María Consuelo Mejía Piñeros, colombiana de nacimiento y mexicana por naturalización, es también creyente y una luchadora incansable por los derechos humanos de las mujeres, particularmente del aborto legal y en condiciones seguras, con libertad de conciencia.
De ahí que la llamó “La Monja Roja del Siglo XXI” por su labor a favor de que las mujeres puedan decidir sobre su maternidad y su cuerpo, sin reñir con la fe católica que ella misma profesa y con la Teología de la Liberación que desde siempre ha abrazado.
“Elvia Carrillo Puerto”, incansable luchadora por el derecho de las mujeres al voto y feminista que dedicó su vida a promover y garantizar los derechos de la mujer mexicana.
Al acto también acudieron la ministra Yazmín Esquivel Mossa, representante de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN); Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, secretaria de la Función Pública, en representación del Presidente” y la escritora Elena Poniatowska; la feminista Martha Lamas.