México.- Cientos de migrantes hondureños derribaron una puerta sobre el puente internacional e ingresaron a la fuerza a territorio mexicano en la frontera de Ciudad Hidalgo, Chiapas, informaron hoy fuentes oficiales.
Fuentes de la Dirección General de Migración (DGM) de Guatemala, citadas por emisoras capitalinas, indicaron que cientos de hondureños se negaron a documentarse y desde la aduana guatemalteca empujaron una puerta hasta derribarla.
Cientos de personas que integran la llamada Caravana Migrante esperaban desde anoche en la aduana de Tecún Umán, en el occidental departamento guatemalteco de San Marcos (a 260 kilómetros de la capital).
En medio de un tumulto, los migrantes hondureños derribaron la puerta y cruzaron el puente sobre el Río Suchiate, limítrofe entre los dos países, e ingresaron a territorio mexicano.
La acción se produjo pese a que el gobierno de México, por razones humanitarias, autorizó el ingreso de los migrantes una vez que se documentaran en la aduana.
Miembros de la caravana entrevistados por la estación de radio guatemalteca reconocieron la disposición humanitaria del gobierno mexicano e indicaron que esperarían su turno para documentarse e ingresar al país.
Las fuerzas de seguridad guatemaltecas no intervinieron durante el tumulto y se mantuvieron al margen para “evitar incidentes de violencia”, indicó un jefe de la policía en Tecún Umán.
Mientras que autoridades de la DGM indicaron que la mañana de este viernes expulsaron a su país al exdiputado hondureño Bartolo Fuentes, detenido el martes pasado en Guatemala y quien es uno de los presuntos líderes de la Caravana Migrante.
Luego del tumulto el comisionado nacional de la Policía Federal, Manelich Castilla Craviotto, afirmó que recuperó el orden y la paz en el puente fronterizo entre México y Guatemala, luego del caos que se vivió en ese punto por el arribo de la Caravana de Migrantes procedentes de Centroamérica.
“Era la prioridad recuperar la tranquilidad y el orden y se logró”, afirmó en entrevista para Milenio Noticias, en la que dejó claro que este ambiente prevalecerá siempre respetando los derechos humanos de los migrantes.
Refirió que se logró organizar a los migrantes procedentes de Honduras y en los términos que indicó el secretario de Gobernación, Alnfonso Navarrete Prida, para permitir una migración ordenada pacífica y legal.
El funcionario explicó que luego de que personal de seguridad fue agredido por personas ajenas a la caravana de migrantes, se estableció comunicación con la gente que venía al frente de la misma y se acordó que el personal migratorio tomará el control del ingreso.
En ese sentido abundó que ya entraron los últimos dos autobuses en lo que el personal de migración se trasladará a personas vulnerables, niños, mujeres y personas de la tercera edad, para que sean atendidos en términos médicos y valorar su estado de salud.
Ante esa situación en la frontera sur del país, afirmó que hay suficientes elementos de la Policía Federal para contener este tipo de circunstancias y seguir garantizando que la migración sea legal y ordenada. “Tenemos una policía fuerte y el personal es suficiente”.