Claudia Sheinbaum nombró su gabinete.
Destaca el nivel académico de quienes lo integran y que sea paritario.
Uno de los más destacados nombramientos es, sin duda alguna, el de Rosa Isela Rodríguez.
Con más de dos décadas en el servicio público, Rosa Isela ha demostrado siempre lealtad al proyecto del que se hace responsable.
Los últimos años de su vida como funcionaria no fueron fáciles.
En el 2015, los operadores políticos de Miguel Ángel Mancera (Héctor Serrano a la cabeza) la culparon de la derrota del PRD en la capital del país.
Acusaron a la entonces secretaria de Desarrollo Social del gobierno capitalino de usar el tejido de las estructuras de esa dependencia. Ellos, Serrano y sus leales, tenían la estructura del partido y decenas de millones de pesos del erario que no llegaron a la operación política y que, con las traiciones a los cuadros perredistas, decidieron impulsar candidaturas de incondicionales que no aportaron los votos necesarios para obtener una victoria electoral.
Hoy, Rosa Isela regresa a un cargo deslavado y ensombrecido por sus antecesores. El paso de Patricia Mercado por la Secretaría de Gobierno siempre tuvo la sombra de Héctor Serrano (quien dicen será coordinador de los diputados federales del PRD) que obstaculizó el desempeño de la ahora senadora electa.
A diferencia de Serrano, el poderosísimo operador político de Miguel Ángel Mancera, Rosa Isela tendrá la oportunidad de, ahora sí, con las estructuras construidas a lo largo de su carrera política, contribuir a la gobernabilidad de la Ciudad de México.
Las expectativas en el gobierno de Sheinbaum son altísimas. El gobierno que termina no pasó de mal administrar los recursos de la capital del país, llevarlo a una escalada de violencia e inseguridad mientras que quienes gobernaban “disfrutaban” de los beneficios del poder.
Sheinbaum y su equipo tienen la oportunidad de recuperar la ciudad para beneficio de sus habitantes.