La Casa del Gato Gazzu, asociación dedicada a la protección y ayuda de gatos en situación de calle, logró concretar luego de cinco años la apertura del “Catfecito” , inaugurado el 1 de abril del 2016. Este espacio ha permitido que hasta la fecha se hayan adoptado un total de 90 gatos, de todo tipo de edades. Higo, Coco, Halley, Roxy y Astro un gatito bicolor blanco y negro que solamente tiene un ojo, son los distinguidos anfitriones que reposan en el árbol o se acomodan plácidamente entre las camitas que están puestas sobres las mesas, para observar atentos a los clientes e intercambiar un par de caricias mientras disfrutan de los alimentos.
El Catfecito ha sido un foro para que diversos artistas puedan exhibir sus obras, tal es el caso de Mónica Padilla, pintora mexicana y creadora del concepto Dilo con Gatos, quien ha logrado posicionar su pinturas en países como Japón, Alemania, España, Colombia, Bolivia, Francia, entre otros.
También se han realizado pláticas para poder enfrentar la pérdida de tu gato, así como fiestas temáticas como El Gato y la Magia e incluso, se han celebrado los cumpleaños de los felinos anfitriones del gato café, todo con la intención de ofrecer actividades para los catlovers y así seguir generando recursos para sustentar los gastos que requiere el albergue.
En su menú podemos encontrar una gran variedad tanto de opciones veganas, Malteacats, cupcakes en forma de gato, neko sushi, Burguer Cats, paquetes ronrroneadores para compartir, pastas y vinos e incluso bebidas que hacen alusión a distintas razas como Bengalí, Persa, Burmés, Noruego, entre otros.
Para estas vacaciones el Catfecito ofrece al público en general talleres de verano, entre los que podemos encontrar Arte en Latte, decoración de Cupcakes y Mandala con Gatos.
“A pesar de que Gato Gazzu tiene mucha difusión en redes sociales, hay gente que al visitarnos por vez primera hace clic con uno de los gatos y deciden hacer el proceso de adopción. Esto nos tiene muy contentos a todos, pues el Catfecito se ha convertido en un espacio ideal para adoptar”, nos comentó Haydeé Itzel Licea Peña, colaboradora y encargada del Catfecito.
Nos dijo que todas las ganancias, así como la venta de artículos para mascotas y los donativos que reciben en este espacio, van directamente al albergue, para que puedan seguir apoyando en el rescate de más gatos en situación de calle.
Las adopciones se realizan de manera online: los interesados acuden al Catfecito, conviven con los gatos que se encuentran en el lugar, o bien a través de la página de Facebook pueden ver las fotografías de los que están disponibles; posteriormente envían un correo a la Casa del Gato Gazzu, llenan un formato, eligen al gatito y agendan una cita para conocerse mejor y saber el tipo de personalidad gatuna que es más conveniente para su estilo de vida.
Como parte del proceso, se programa una visita domiciliaria con la finalidad de conocer el hogar y las condiciones de seguridad que hay en el mismo; en el caso de tener otros gatos, es necesario presentar una prueba de leucemia, su cartilla de vacunación, así como un certificado de esterilización, pues desde que son rescatados se someten a revisiones veterinarias para asegurarles una vida sana y plena. Finalmente, el día de la adopción se les pide a las familias un donativo en especie o en efectivo, para seguir costeando las labores altruistas que llevan a cabo.
Desafortunadamente, hace unos meses La Tienda de los Gatos, una de sus sucursales en Reforma, fue asaltada:
“Nos robaron hasta la caja de donativos que teníamos para el tratamiento de algunos gatos con necesidades especiales, fue algo muy lamentable, pero gracias al apoyo de los proveedores y las redes, nos estamos recuperando poco a poco de las pérdidas materiales y seguimos recibiendo donativos; en verdad nos sentimos afortunados por la respuesta de la gente”.
Fiestas, talleres, adopciones, buena comida, gatos cariñosos, un cálido ambiente y un sinfín de razones sobran para visitar el Catfecito, un lugar para relajarse y disfrutar de la compañía felina que sin duda les dejará un buen sabor de boca a todos los “gatólicos” y curiosos de este concepto de gato café.
Está ubicado en la calle Baja California #266.
Alejandra Forero. Egresada de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (UNAM), fanática del estilo Kawaii y los colores estridentes, además del anime japonés. Catlover de profesión, promotora de la ailurofilia (es momento de romper con todos los mitos negativos que hay alrededor de estos enigmáticos seres, los felinos).