Jolie es un caso excepcional en este siglo XXI marcado por temas que nos inquietan.
Angelina Jolie dio a conocer su divorcio con Brad Pitt. Y, como era de esperarse, el anuncio alcanzó un nivel de ciberpopularidad máximo, con el hashtag #Brangelina.
Podrían hacerse cientos de combinaciones con personajes interpretados por los actores para referirnos a la idea popular de que “detrás de todo gran Aquiles hay una gran Tomb Raider” e invertir el orden de los factores para referirnos a esta pareja que, aunque legalmente separada, quedó grabada en la memoria del cine… y más allá.
Angelina Jolie Voight es reconocida en todo el mundo, primero por su trayectoria de actriz y modelo y posteriormente por su labor humanitaria.
Jolie es un caso excepcional en este siglo XXI marcado por temas que nos inquietan, desde el rumor del hallazgo del planeta Nibiru que colisionaría con la Tierra (The Daily Mail) hasta la creciente dependencia tecnológica, la estresante inmediatez como ritmo de vida, ¿cómo educar a un millenial?, la ola financiera global o las elecciones en Estados Unidos.
Y todos los temas vienen en el mismo paquete. Así, la calamidad se refleja en los astros, la tecnología, las finanzas y en la política:
Dentro de un mes aproximadamente, en aquella potencia mundial a la que todas las geografías nos atan, se celebrarán elecciones.
Este inicio de semana, el dólar estadounidense rompió la barrera de los 20 pesos en bancos (20.13), y los analistas aún elevan sus pronósticos.
El lunes (también) se realizó un bienintencionado simulacro de sismo de gran magnitud en la Ciudad de México. Pero en realidad, con un triste sabor a ignorancia y apatía, fue llevado a la práctica por miles o millones de ciudadanos como un juego.
Hemos leído a analistas financieros serios hablar de un clear and present danger; nos han alertado de una realidad simple y patética: “Trump ha tenido más bancarrotas que éxitos en sus inversiones. Trump no va a cambiar nunca y si gana, la relación con México será para nosotros un verdadero desastre”.
Ante este panorama, hoy se antoja ver el lado más brilloso del cristal.
Quizá todos los hombres quisiéramos una Tomb Raider (en cuerpo y alma). Y todas las mujeres, un Aquiles.
Angelina Jolie, hoy no es una llana noticia de farándula. Es el ejemplo de que una mujer es más (aún sin senos y sin ovarios) que un solo oficio.
Sin demeritar el humanismo y la brillante trayectoria del actor estadunidense, Angelina hoy destella entre el mar de luces y sombras noticiosas, por todas las batallas que ha librado:
Es la mujer que partió del cine a la filantropía. La amenaza del cáncer de pecho (87% de probabilidad) la condujo a extirparse ambos senos; decidió hacer pública su historia real para ayudar a otras mujeres. También se extirpó los ovarios, por la misma razón. Además, se unió al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR); fue Embajadora de Buena Voluntad. Fundó el Centro Nacional para los Refugiados y los Niños Inmigrantes. Por otra parte, como embajadora de la ONU, ha sido promotora de la denuncia de violencia sexual contra las mujeres en la guerra. Tiene tres hijos con el actor Brad Pitt; de ellos, tres son adoptados y tres biológicos, entre éstos, un par de mellizos. Es ganadora de dos Premios Óscar.
Ian Soriano
El estudio de la Comunicación y el periodismo (UNAM, FES Aragón) le revela su vocación literaria a la edad de 18 años. Es autor de los poemarios “Igual que los muros de naipes de un castillo sinfónico” y “Explotó todo el aroma de la sangre”. La fotografía y el video le representan otra forma de expresión poética. Convencido de que estar informado es algo valioso.
