La cruda realida del Hoy no Circula.
Ayer terminó lo que muchos llamaron una aspirina contra el cáncer, el “Hoy no Circula ampliado".
Desde antes la pregunta recurrente era: "¿Sirvió de algo?".
No sólo no sirvió, sino que complicó más las cosas, han coincidido estudiosos del tema. Y dicho sea de paso, también le complicaron las aspiraciones y la aceptación ciudadana al jefe de gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera.
Desde que se implementó, los expertos dijeron una y otra vez, que se trataba de un “experimento”, y advirtieron que con esa medida no bajarían los niveles de contaminación. Nunca los escucharon, nunca los atendieron.
Fueron 87 días, desde el 5 de abril, que se aplicó el programa emergente, ante los altos índices de contaminación, para que todos los vehículos dejarán de circular un día a la semana, sin importar la calcomanía (00, 0, 1 y 2).
¿Hubo alguna evaluación a la relación costo-beneficio por este programa? Si existió, jamás la conocimos.
Lo que supimos, fue que gracias a Ehécatl y Tláloc, sin tanta faramalla, los índices de contaminación disminuyeron. No así, cuando, incluso; dejaron de circular hasta un millón de vehículos en el otrora Distrito Federal, ahora, “Ciudad de Primera”.
También nos dijeron que no se trataba de una decisión populista, sino de cuidar la salud de los 20 millones de capitalinos, sobre todo de los sectores más vulnerables.
Jamás se revelaron datos oficiales de cuántas personas han muerto debido a enfermedades relacionadas a la contaminación. Con ligereza, la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAME) informó que al año se reportan 22 mil muertes por contaminación, mil 200 en la capital del país o miles más, depende la fuente. ¿Dónde están los estudios? La COFEPRIS los desmintió, los exhibió.
Y, ¿qué hay de las gasolinas que no cumplen la norma ambiental? ¿Del control de la industria? ¿Del transporte público deficiente e insuficiente? ¿De la corrupción en los verificentros? ¿De la urgencia de poner en marcha políticas integrales y no sólo paliativos? Pues nada. Dejan de circular los que tienen vehículo y se acabó.
¿Por qué tendríamos que confiar ahora en la siguiente medida? “La nueva norma de verificación vehicular en la Megalópolis” llega con el beneficio de la duda, porque se supone que, a partir de mañana, 1 de julio, aplicará en la Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Morelos y Estado de México; y en cuanto opere, ya no habrá corrupción en los verificentros, dejarán de circular los vehículos que más contaminan, entre ellos el parque vehicular público y no habrá operativos ni estrategias “cortinas de humo”.
Desde hoy, los vehículos con holograma 00 y 0 podrán circular todos los días. Los de holograma 1 descansarán un día a la semana y dos sábados al mes. Holograma 2, no podrán circular un día a la semana y todos los sábados.
Entre experimentos, ocurrencias, guerra de cifras, culpas entre gobiernos y funcionarios, promesas y corrupción; parece que debemos prepararnos (si es que no lo estamos), para seguir respirando “aire envenenado”, en la capital del país.