Cuatro mujeres relatan sus diferentes procesos de convertirse en mamás. Comparten sus puntos de vista sobre el valor de ser madre y retos a los que se enfrentaron durante su experiencia.
No es un día más, es un “bonito” día para ellas. La celebración por el Día de las Madres es significativa para todos los que tienen a su mamá al lado o para los que alguna vez la tuvieron y ya partió.
Cuatro historias de mamás
Para Lulú, Gabriela, Maribel y Concepción, ser madre es una experiencia “maravillosa, bonita y única”. Así lo expresan con una sonrisa.
Sus retoños
Gabi desea que sus hijos sean buenos seres humanos y agradables. Mari y Concepción quieren llevarlos “por el buen camino”, pues aseguran que los hijos siguen los buenos ejemplos de mamá. Lulú le enseñará a su "retoño" a respetar a todas las personas.
Por amor o por casualidad
Gabi asegura que planeó a su primer hijo. "Fue por convicción la elección de ser madre", asegura.
Maribel pensó en el aborto. Sentía que la vida se le venía abajo. Pero con la ayuda de su pareja tuvo el valor de enfrentarse al papel de ser madre por primera vez.
Concepción no se arrepiente de haberlos tenido, aunque sus embarazos fueron de alto riesgo.
Lulú no lo tenía contemplado en su vida, mas nunca pasó por su mente abortarlo. Reflexionó que podía ser madre sin necesidad de tener un hombre a su lado.
Médico o partera
Lulú sintió miedo al entrar al quirófano. Imaginó que no saldría de ese lugar. Pero cuando nació su bebé, el miedo se fue.
A Maribel no le gustan los hospitales. Estuvo una semana internada porque su bebé fue sietemesino y aún no tenía desarrollados sus pulmones.
Concepción asegura que la trataron bien en sus dos partos y que sus hijos son “una bendición de la vida”.
Gabi refiere que en ningún hospital la quisieron recibir, así que tuvo la experiencia de dar a luz con la ayuda de una partera.
Regalo del 10 de mayo
Maribel espera un beso y una rosa.
Gabi desea recibir una carta y una flor.
Concepción espera su pastel de mil hojas y las mañanitas, como cada año.
Lulú celebrará su cumpleaños y su 10 de mayo al mismo tiempo.
Con todas las vivencias y diferentes procesos de convertirse en mamás, cuatro testimonios reflejan que ser madre, a final de cuentas, es la sensación más sagrada que se puede vivir: dar vida.